Una de las zonas más típicas de Madrid para salir de tapas es el barrio de La Latina. A cualquiera que le preguntes te va a decir que vayas para ese lado. Las veredas de las 7 u 8 manzanas que rodean la estación del Metro están repletas de barcitos a los que ir a chuparse los dedos hasta dejarlos arrugados. Lo más común, en las cantinas tradicionales, es que se coman de parado, contra la barra, cerveza en mano y a pura charlatanería entonada. Supe degustar, por estos pagos, unos riquísimos chipirones al ajillo (una especie de calamares).
Tan famoso como La Latina es el Mercado de San Miguel, 1200 metros cuadrados pegados a la Plaza Mayor y dedicados únicamente al arte de engordar. Hasta ahí fui la primera noche que salí de tapas y creo que tardé más en elegir qué comer que en todo lo demás. Los puestos se distribuyen uno al lado del otro ofreciendo una variedad increíble de manjares gourmet. Las tapas son buenísimas, pero la realidad es que si sos viajero y estás medio corto de plata, el tapeo callejero es mucho más pocket friendly.
Y justamente para esto existen otras partes de la ciudad. Decidí entonces después de haber conocido ya las dos zonas más famosas para salir de tapas, mandarme a por otros horizontes. Fue así como preguntando llegué a el lugar para tapear en Madrid: El Tigre.
Grata sorpresa cuando después de quedar atónito por pagar una cerveza €2,5 el chaval de la barra me dice: “Coge eso”. Me pongo a mirar entonces qué es lo que más me tienta de un plato lleno de tapas cuando ante mi soso proceder me repite: “Anda, cógelo, que es todo para ti, tío”.
En la montaña de comida que yacía junto a mi cerveza (que además era más grande de lo que se acostumbra acá) se divisaban croquetas de jamón y queso, ajíes de todos los colores, papas con salsita gourmet, salchicha parrillera, pollo y distintas tapas a base de pan: con jamón, con queso gruyere y con salsa de rockefort y otros quesos. Un banquete de verdad, no como esos bistecs de finísimas berenjenas salteadas en extractos de su colorido jugo que te sirven en Palermo Chic. Y lo mejor, la panzada viene con cerveza incluida por la módica suma de €2,5.
INFO ÚTIL | CÓMO LLEGAR A EL TIGRE
En El Tigre también se come de parado sobre barras que recorren las paredes de la cantina. Y como el lugar es famoso, recomendaría llegar en horarios no pico (antes de las 13hs o después de las 14.30hs. al mediodía, y antes de las 20.30hs. o después de las 22hs. a la noche), cosa de poder hacerse de un lugarcito para apoyar las cosas y charlar a gusto con la gran cantidad de gente y grupos de amigos que se juntan a pasar un buen rato.
Dirección: Calle de las infantas 30, Chueca, Madrid.
28/05/2015 at 09:47
Datazo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Tomo noto y empiezo a salivar!!!!! 😉
28/05/2015 at 10:25
Andy: preguntonta…que onda el tema propinas por aquellos pagos??????????
28/05/2015 at 11:02
Viste que Kretina decía que podías comer con 6 mangos diarios? se olvidó de decir que eso sería por 1 tapa y en Madrid! dusfrutá muchoooooo!!!!!y tomate una cañita por mi!;)
28/05/2015 at 18:53
Bellísimo lugar! Felicitaciones
14/07/2016 at 02:15
El Tigre, el mejor lugar para unas tapas, me encantó. Cuando estuve en Madrid fui varias veces!!!